El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, anunció que este año se aplicará un presupuesto de más de 400 millones de pesos para la búsqueda de desaparecidos.
El funcionario detalló que de las 40 mil personas desaparecidas en el país, la mayoría son jóvenes y personas de escasos recursos que viven en las zonas más pobres del país y en las rutas de trasiego de drogas.
Acompañado del presidente Andrés Manuel López Obrador y la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, Encinas presentó en la conferencia matutina la estrategia de búsqueda de personas desaparecidas, que consideró “una crisis humanitaria”, al alcanzar no solo 40 mil personas desaparecidas, sino más de mil 100 fosas clandestinas y alrededor de 26 mil cuerpos sin identificar en el país.
“La mayor parte de las personas desaparecidas son jóvenes entre los 17 y los 29 años, particularmente jóvenes de escasos recursos. Por supuesto que hay un número significativo de mujeres que están vinculadas lamentablemente al delito de trata de personas y tenemos desaparición infantil de manera creciente.
“La violencia contra los niños ha crecido de manera significativa en los últimos años y habrá un programa especial que estamos trabajando con el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes”. También precisó que “la absoluta mayoría de las desapariciones son cometidas por particulares vinculados a la delincuencia organizada y se registran justamente en las zonas de mayor marginación y pobreza, y las zonas de trasiego en las rutas de la droga, y otro tipo de delitos, como la trata de personas, la extorsión y otros fenómenos delictivos en el país”.
El presidente López Obrador dijo que esta crisis es producto del neoliberalismo, del abandono a los jóvenes y “es el saldo de una guerra absurda” que convirtió al país “en una enorme fosa clandestina”; por lo que reiteró que su gobierno mantiene el compromiso de “nunca más utilizar la fuerza, nunca más declarar la guerra para enfrentar problemas sociales y de inseguridad”. Recalcaron que para esta administración es urgente tener un plan claro para la desaparición forzada “ya sea por agentes del Estado o por particulares, que es una herencia del régimen anterior”.
Otro sector importante al que este gobierno habrá de poner especial atención es a los migrantes, pues entre ocho y 10 por ciento de las personas desaparecidas son precisamente provenientes del triángulo norte de Centroamérica. Por lo que habrá atención especial en las rutas por la que pasan los centroamericanos, como lo es el trayecto Chiapas-Oaxaca-Veracruz-Tamaulipas. El subsecretario de Derechos Humanos dijo que estos números también son consecuencia de una “profunda simulación” en las pasadas administraciones, pues de contar con un presupuesto de 468 mil 946 millones de pesos aprobados para la Comisión Nacional de Búsqueda, solo se ejercieron seis. Por lo que ayer el gobierno federal presentó la estrategia para una “implementación real” en la ley de desaparición forzada de personas y la creación del Sistema Nacional de Búsqueda que contará para este año con 400 millones de pesos y están gestionando poder utilizar los 7 mil 500 millones con que cuentan los estados para identificación forense.
Encinas detalló que este plan irá de la mano con los familiares de las víctimas, los colectivos de atención a éstas, las autoridades locales, pero también expertos internacionales como la Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas. Insistió en que en la administración anterior fue un engaño a los familiares de las víctimas, pues la estrategia contra este delito se presentó dos semanas antes de que terminara la pasada administración. Detalló que espera que en marzo quede instalado formalmente el sistema, comenzando por nombrar al nuevo titular de la Comisión Nacional de Búsqueda luego de realizar las entrevistas correspondientes a los 11 aspirantes hasta el próximo viernes y, que a su vez, tendrá como responsabilidad el diseño del Programa Nacional de Exhumaciones e Identificación Forense, así como las acciones de búsqueda, verdad y justicia para las víctimas.
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